Mientras prepara sus memorias, el profesor Tomás Rodrigues se detiene en las zonas grises de su pasado: episodios omitidos, dudas sin resolver, silencios que persisten.
Las correcciones indaga, con sutil ironía, en los contornos imprecisos de la memoria y la ficción -y en el deseo, quizá ilusorio, de corregir un pasado que se resiste al cierre.
"...es también un retrato del mundo académico globalizado, de las relaciones afectivas en constante mutación y de los dilemas éticos que surgen cuando el yo narrativo colisiona con el yo real."
-El Tiempo